Un buen diseño y una narrativa potente dan vida a la esencia de una marca. Y sea de la industria gastronómica o no, esto debe plasmarse en todo, incluso a la comida si la haces participe de tu comunicación. 

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Te has preguntado; ¿Qué comería tu marca? ¿Qué ingredientes elegiría? ¿Si come de día o de noche? ¿Si come solo, con amig_s o en familia? ¿Preferiría una cazuela o una pizza? Los consumidores generan vínculos con marcas con las que se sienten identificad_s y  junt_s podemos potenciar su personalidad.

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Desde los colores de los ingredientes, su origen, el método de cocción y el estilo de decoración de cada plato que muestras en tus redes sociales o publicidad , hasta lo que ofreces en tus eventos. Todo transmite.